Usar audífonos puede retrasar la aparición del Parkinson, según un estudio

Mujer con dolores en las articulaciones (Shutterstock)

Unos simples audífonos pueden tener el potencial de retrasar muchos casos de la enfermedad de Parkinson, según una reciente investigación llevada a cabo por la Universidad de Salud y Ciencias de Oregón y el Sistema de Atención de Salud de Asuntos de Veteranos de Portland (Estados Unidos). Esta conclusión se extrae tras el descubrimiento de que las personas con pérdida auditiva tienen más riesgo de recibir un diagnóstico de Parkinson.

El estudio, publicado en la revista JAMA Neurology, muestra que, cuanto más grave sea la pérdida auditiva, más probable es que se produzca la aparición de esta enfermedad. Sin embargo, la prescripción de audífonos en las fases primarias de esta afección del oído puede reducir el riesgo del diagnóstico de Parkinson. Además, se trata de una intervención de bajo costo que puede contribuir a mantener el cerebro sano a medida que envejecemos.

Como ocurre con la demencia, el Parkinson está relacionado con cierto deterioro cognitivo. Y al igual que la pérdida auditiva, los problemas de visión y la pérdida del olfato también pueden ser señales físicas de alerta del Parkinson. Entre otros síntomas, destacan la lentitud de movimientos, los temblores y la rigidez muscular.

“Puede ser el factor de riesgo modificable más importante para la demencia en la mediana edad y podría resultar lo mismo para la enfermedad de Parkinson”, afirma el neurólogo Lee Neilsen, líder de la investigación de la Universidad de Salud y Ciencias de Oregón y el Sistema de Atención de Salud de Asuntos de Veteranos de Portland.

Para realizar el estudio, los científicos de la Universidad de Oregón analizaron durante dos décadas una cohorte de veteranos de guerra estadounidenses para encontrar signos de pérdida de audición, ya fuera leve, moderada o grave. Así, el equipo afirma haber encontrado “evidencia sólida de que la administración de audífonos reduce el riesgo de enfermedad de Parkinson a nivel poblacional”.

En comparación con aquellos con audición sana, los veteranos con pérdida auditiva leve (generalmente aquellos que tenían entre 60 y 70 años) tuvieron una mayor incidencia acumulada de Parkinson a los cinco, 10, 15 y 20 años de seguimiento. Tras dos décadas, los investigadores encontraron 10 casos adicionales de Parkinson por cada 10.000 individuos que estaban relacionados con una pérdida auditiva leve.

Los datos del Parkinson en España

Según la Sociedad Española de Neurología (SEN), se estima que al menos 300.000 personas sufren de Parkinson en España, con un incremento del 272% desde 2011, lo que representa un aumento considerable en el número de afectados por esta enfermedad neurodegenerativa. Cada año se identifican alrededor de 10.000 nuevos casos en España, y se estima que un tercio de las personas afectadas aún no han sido diagnosticada.

La enfermedad de Parkinson afecta a personas de todas las edades, con un 15% de los casos correspondientes a menores de 50 años. Además, se destaca que los pacientes con Parkinson pueden tardar entre 1 y 3 años en obtener un diagnóstico, y hasta un 25% de los pacientes diagnosticados pueden tener en realidad otra enfermedad.