Mejorar el sonido del televisor en casa requiere algo más que simplemente adquirir altavoces de alta calidad. La disposición de los muebles y la correcta colocación de los altavoces son factores cruciales que pueden transformar la experiencia auditiva en cualquier sala de estar.
Por extraño que parezca, esta es una de las maneras de mejorar nuestra experiencia auditiva, ya que el manejo del espacio es clave para contener el audio y que al momento de sentarnos frente a la pantalla el sonido se distribuya de la mejor manera.
La importancia de la distribución de la sala
El sonido viaja a través de vibraciones físicas conocidas como ondas sonoras. Estas ondas pueden reflejarse en las superficies de una habitación o ser absorbidas por los objetos con los que entran en contacto.
Por lo tanto, cada objeto en una sala puede influir en el flujo del sonido, mejorando o perjudicando la calidad del audio. Entender este principio es esencial para comenzar a ajustar la disposición de los muebles con el objetivo de mejorar la acústica. A continuación algunas recomendaciones:
- Zonas de escucha óptimas
Cada habitación tiene “zonas de escucha” que dependen de sus dimensiones y tamaño. Estas zonas determinan cómo se deben posicionar los altavoces para obtener la mejor respuesta de frecuencia. Una herramienta útil para identificar estas zonas es el uso de aplicaciones como Soundton, que permiten introducir las dimensiones exactas de la sala y la configuración de los altavoces para generar un gráfico de respuesta de frecuencia que identifica la ubicación ideal de los altavoces.
Es importante usar estas aplicaciones como un punto de partida. Cada habitación es única, y será necesario hacer ajustes y equilibrar el audio, lo cual incluye modificar la configuración de ecualización como los bajos y agudos, además de la colocación física de los altavoces.
- La regla de tercios
Una técnica comúnmente utilizada es la “regla de tercios”. Esta técnica implica dividir la habitación en tres segmentos iguales mediante dos líneas invisibles y colocar los altavoces a lo largo de la primera línea y el área de asientos a lo largo de la segunda línea.
Este método ayuda a distribuir el sonido de manera más equilibrada. Sin embargo, esto es solo una aproximación, ya que el equilibrio siempre dependerá de la forma y el tamaño específicos de la habitación.
- Posicionamiento del subwoofer
El subwoofer es uno de los componentes más críticos en un sistema de sonido, y su ubicación puede hacer una gran diferencia en la calidad del sonido. Mantener el subwoofer alejado de la pared al menos 15 centímetros puede ayudar a reducir las frecuencias resonantes y ofrecer una respuesta de bajos más clara.
Una recomendación adicional es colocar este dispositivo a una quinta parte de la longitud de la habitación desde la pared. También se puede ajustar la posición de escucha en relación con el subwoofer para mejorar el equilibrio tonal.
Ajustes en la disposición de los muebles
Una vez identificadas las zonas de escucha óptimas, se debe inspeccionar la disposición de los muebles para asegurarse de que no estén perjudicando la calidad del sonido. Para lograr un mejor audio, se deben seguir estos consejos:
- Mover la mesa de centro y las estanterías
La mesa de centro puede causar que el sonido del canal central del altavoz se refleje, enturbiando el audio y dificultando la claridad del diálogo. Incluso el material de la mesa puede afectar: el vidrio crea reflejos más duros en comparación con la madera o la tela. Es aconsejable eliminar la mayor cantidad posible de objetos entre el sofá y los altavoces para lograr un camino despejado y un sonido más equilibrado.
Las estanterías también pueden ser problemáticas si están ubicadas en el camino del sonido. Colocar las estanterías contra la pared puede actuar como una capa de insonorización en lugar de ser un obstáculo para el flujo del sonido. Cuantos más libros se tengan, mejor, ya que absorben el sonido y mejoran la acústica de la sala.
- Colocar una alfombra entre los altavoces izquierdo y derecho
En habitaciones con pisos de madera, estos pueden causar reflejos de sonido no deseados similares a los de una mesa de centro. Colocar una alfombra gruesa entre los altavoces puede reducir estos reflejos y mejorar la calidad del sonido. Una alfombra debajo del subwoofer también puede reducir la vibración del piso y los zumbidos molestos.
- Cerrar las cortinas
Al igual que con las alfombras, las cortinas gruesas pueden mejorar el sonido en una habitación. Cerrarlas puede ayudar a absorber las ondas sonoras y evitar que se reflejen en las ventanas, lo que mejora la calidad del sonido. Incluso hay cortinas especiales diseñadas para bloquear el ruido exterior y absorber el sonido interior, que pueden ser una excelente inversión para mejorar la acústica de la sala.