A mediados de octubre de 2023, las alarmas se activaron en el penal de Devoto al haber detectado que el jefe sicario Mauricio Jesús Laferrara, alias “El Caníbal”, se había fugado de su celda ubicada en el Pabellón N° 11. Medio año más tarde, el comando de Inteligencia Criminal creado para dar con su paradero logró recapturarlo en una pequeña localidad de Santa Fe.
“Fueron seis meses de un trabajo sigiloso y en conjunto que hoy da sus frutos”, aseguraron las fuentes oficiales a Infobae luego de que la detención del fugitivo fuera exitosa. Como producto de varias tareas de inteligencia y cotejo de información, los agentes provinciales y nacionales rastrearon al sicario más peligroso de la banda narco de Esteban Alvarado hasta Andino, una ciudad ubicada al norte de Rosario.
De esta manera, organizaron un operativo para detenerlo durante la jornada de este viernes. En el operativo donde se logró recapturar al prófugo, participó la tropa de operaciones especiales y la PFA.
Quién es Mauricio “El Caníbal” Laferrara
Después de haber sido buscado en múltiples procedimientos en Rosario, Laferrara cayó el 18 de octubre de 2019 en una casa del barrio Echesortu, en un allanamiento hecho por la Tropa de Operaciones Especiales de Santa Fe, que por entonces lideraba el propio Bertolotti. En ese operativo se incautaron 435 gramos de cocaína, 6.000 dólares y 1.400.000 pesos.
Mauricio era, según fiscales provinciales e investigadores policiales, el sicario preferido de Alvarado y quien coordinaba los ataques a tiros para la organización rival a Los Monos. En dos juicios diferentes, la Justicia provincial le dio la pena a prisión perpetua. Uno de ellos, que terminó en abril de 2022, por haber matado a un joven en un comercio. El otro, que culminó dos meses después, por haber cometido otros cinco homicidios. Por su parte, el Tribunal Oral Federal Nº 2 de Rosario le dio sus 5 años por narcotráfico.
La primera sentencia fue por una violenta irrupción de un grupo de gatilleros ocurrida el 7 de septiembre de 2019 en una distribuidora de gaseosas ubicada en el barrio Plata de la zona sudoeste de Rosario, donde Laferrara asesinó a Cristian Beliz (27) e hirió al dueño Oscar César García y a otro hombre que estaba en el lugar. Según figura en la investigación, el propietario del lugar, conocido como “El manco” o “El gitano”, había tenido relación con Los Monos y usaba ese local como “pantalla para otros negocios”. García ya era conocido en el radar policial y judicial, puesto que en mayo de 2019 había recibido una condena a 3 años de prisión condicional por asociación ilícita, estafa, defraudación, usurpación y lesiones calificadas.
La otra causa por la que afrontó una condena a prisión perpetua es la que impulsaron los fiscales Luis Schiappa Pietra y Matías Edery contra la organización liderada por el capo narco Esteban Lindor Alvarado, donde Laferrara fue imputado por asesinar a cinco personas.
Nota en desarrollo.