Radicalismo: hubo tregua en el bloque de diputados y la ruptura anunciada quedó en suspenso

A último minuto, cuando todo presagiaba una ruptura estruendosa en el bloque de diputados de la UCR, los sectores en pugna izaron una bandera blanca. Los simpatizantes y los detractores del gobierno de Javier Milei acordaron una tregua hasta mañana para intentar acordar las reglas de convivencia a futuro que permitan mantener la frágil unidad de la bancada.

La fractura del bloque quedó en suspenso y si bien nadie descarta que ése sea el corolario de las negociaciones, por de pronto esta tarde, durante la reunión de bloque –comandado por Rodrigo De Loredo-, se decidió bajar el nivel de tensión interna. Las conversaciones continuarán mañana por la mañana y estarán en manos de una mesa de coordinación: allí convergerán representantes del grupo que lideran Facundo Manes y Martín Lousteau –críticos del Gobierno- y del sector más afín al oficialismo, encarnado por los cinco diputados que, con sus votos, apoyaron los vetos que impuso Milei a las leyes de jubilaciones y de presupuesto universitario.

En medio de los intentos por mantener la unidad, desde el Gobierno meten cuña para alentar la división. Desde la Jefatura de Gabinete trascendió que invitaría a los radicales afines al Gobierno a participar de la reunión con referentes legislativos del bloque de Pro que habitualmente se celebra en la Casa Rosada y que es encabezada por el jefe de Gabinete, Guillermo Francos. La conducción a cargo de De Loredo acordó, en principio, no concurrir.

Facundo Manes en la marcha universitaria en el Congreso de la Nación

“La invitación no se formalizó a la conducción del bloque, por lo tanto no vamos a asistir”, indicaron cerca de De Loredo. Sin embargo, nadie en la bancada podía garantizar anoche que los cinco diputados afines al Gobierno –Mariano Campero, Luis Picat, Martín Arjol, Federico Tournier y Pablo Cervi- finalmente asistan al encuentro.

Las razones de la tregua

Hasta ayer, la decena de diputados referenciados en Lousteau y Manes estaban dispuestos a dar el portazo, reacios a seguir compartiendo un espacio común con quienes abiertamente simpatizan con las políticas oficialistas. “Vamos a conformar un bloque nuevo sin infiltrados de Milei”, avisaron la semana pasada.

En este grupo se enrolan, además del neurocientífico, Pablo Juliano (Buenos Aires), Fernando Carbajal (Formosa), Marcela Coli (La Pampa), Jorge Rizzotti (Jujuy) y Manuel Aguirre (Corrientes). Se les suman los diputados que se asocian a Evolución: las porteñas Carla Carrizo y Mariela Coletta, Danya Tavela (Buenos Aires) y Marcela Antola (Entre Ríos).

A manera de amenaza, esta decena de diputados decidió no participar de la reunión de la bancada de anoche convocada por De Loredo, pero a última hora decidieron enviar a Danya Tavella como prenda de paz.

Los gestos no quedaron allí. Gracias a los buenos oficios de Julio Cobos, Fabio Quetglas y Atilio Benedetti, equidistantes de uno y otro sector, los “rupturistas” accedieron a levantar el pie del acelerador y se acordó la tregua hasta mañana.

Julio Cobos y Rodrigo De Loredo en el recinto de la Cámara de Diputados

Las razones que explican este impasse son varias. El ala dura del bloque accedió a dejar en suspenso la ruptura con la expectativa de negociar más espacios de poder dentro del bloque y en las comisiones, hoy controladas por los sectores que simpatizan con el oficialismo. “De los cinco cargos principales que tiene el bloque, tres lo ocupan ellos: Soledad Carrizo, Pamela Verasay y el propio De Loredo”, plantean.

Desde el sector de Lousteau postulan a Carla Carrizo como secretaria parlamentaria de la bancada; ese cargo está hoy en manos de su prima Soledad, cuyo referente en el partido es el gobernador de Mendoza, Alfredo Cornejo. El mandatario provincial, enemistado con Lousteau, es un fervoroso impulsor de acercar al partido al redil libertario con vistas a las elecciones legislativas del año próximo.

Sin embargo, las negociaciones sobre este punto se preanuncian difíciles. “Los lugares en el bloque y en las comisiones se definieron de acuerdo a la representación de cada sector en la bancada. Todos queremos preservar la unidad, pero lo cierto es que si el sector de Manes y de Lousteau deciden romper, es porque no tienen los votos suficientes para imponer su criterio en el bloque. La mayoría está en desacuerdo con hacer una oposición férrea a este gobierno como ambos pretenden”, afirman.