Una semana después de que se desatara un incendio forestal en el Parque Nacional Los Alerces de Chubut, las autoridades reiteraron su preocupación por la extensión que alcanzaron las llamas en todo el territorio. Hasta el momento, se confirmó que unas 2.835 hectáreas fueron consumidas, a la vez que advirtieron que la intensidad del fuego no da tregua. “Es una tarea complicada”, aseguraron.
Todo comenzó durante la noche del jueves 25 de enero, cuando se activaron dos focos ígneos en la zona de la Bahía Rosales que, por la proximidad que tenían entre sí, desencadenaron en que la situación se agravara por la expansión que adquirieron. Con el correr de los días, la situación se tornó cada vez más dificultosa para los brigadistas que trabajaron en el lugar, ya que informaron que, hasta ayer, todos los frentes se encontraban activos.
Durante la mañana del viernes, el personal de emergencia utilizó los arroyos cercanos como fuente abastecedora de las herramientas manuales que destinaron para crear varias líneas de agua en las zonas más críticas del incendio. Horas más tarde, el Servicio Provincial de Manejo del Fuego de Chubut informó que el panorama podría volverse crítico, debido a que el incremento de las ráfagas de viento provenientes del sector oeste fomentaría la intensidad de las llamas.
“El día de hoy (por el viernes), muy difícil y muy complicado, empiezan a caer algunas gotas. Veremos si esto sigue”, manifestó el intendente del Parque Nacional Los Alerces, Danilo Hernández Otaño, en referencia a las breves lluvias que se desarrollaron durante el día. Además, advirtió que “el fuego está muy difícil, explotaron varios focos, así que la tarea está realmente complicada”.
En cuanto a las precipitaciones que se reportaron en el lugar, el jefe comunal manifestó que una caída abundante de agua podría ser beneficiosa para el operativo, pero que si se trataba de una breve lluvia no modificaba la situación. Finalmente, comunicaron que las leves precipitaciones cesaron cerca de las 15 horas.
De acuerdo con la información obtenida por Télam, a lo largo de la jornada hubo un total de 347 personas que formaron parte del operativo de contención, entre ellas, unas 254 estuvieron presentes en el terreno de difícil acceso y unos 93 agentes que se encargaron de brindar apoyo logístico a las cuadrillas en actividad.
En simultáneo, el Servicio Nacional de Manejo del Fuego (SNMF) brindó tres helicópteros, dos aviones hidrantes, uno de observación, uno anfibio tipo “FIREBOSS” y una flota de drones que fueron utilizados para monitorizar los puntos más calientes del territorio.
Para las tareas por tierra, hubo autobombas que pertenecían a los cuarteles de bomberos de la región, máquinas para abrir cortafuegos y fajas de contención para cuidar la integridad de los caminos rurales por los que accedieron al parque. Asimismo, señalaron que se desplegaron dos campamentos en los establecimientos recreativos de Planta Educativa y Bahía Rosales para que los brigadistas pudieran acceder a sanitarios, duchas calientes, zonas de descanso y alimentación.
En cuanto al pronóstico que se espera para el fin de semana en la zona, el Servicio Meteorológico Nacional (SMN) anunció que el sábado el cielo permanecerá parcialmente nublado, pero que persistirán los vientos de la zona oeste. Se espera que la velocidad de los mismos no superen los 60 kilómetros por hora. Además, indicaron que la temperatura mínima será de 7 grados, mientras que la máxima alcanzará los 23 grados.
El domingo se notará un leve incremento en los niveles térmicos, debido a que la mínima ascenderá a los 10 grados y la máxima podría subir hasta los 28 grados. El cielo nublado será una constante, aunque se observará la llegada de ráfagas del noroeste que podrían complicar el desarrollo del incendio forestal.
Aparentemente, los próximos días no presentarán condiciones que puedan ser beneficiosas para controlar la situación; sin embargo, señalaron que existe una mínima posibilidad de que se desarrollen lluvias aisladas durante la madrugada del lunes. En paralelo, los fuertes vientos también continuarían, por lo que podría extenderse el operativo para combatir las llamas.