En medio de la serie de los cuartos de final de la Copa Sudamericana, el Athletico Paranaense anunció la contratación de Lucho González, para que asuma el cargo de la dirección técnica y se convierta en el cuarto entrenador del equipo brasileño en lo que va de temporada.
“Lucho González comienza a escribir hoy un nuevo capítulo de su exitosa historia en nuestro Furacão”, escribió la entidad de Curitiba en sus redes sociales como mensaje de bienvenida. El reto inminente del flamante es el partido del jueves contra el Racing en el Cilindro de Avellaneda, cuyo resultado definirá el boleto a las semifinales de la competición internacional.
La ventaja es que cuenta con dos resultados posibles, dado que en el primer choque disputado en el país vecino, el Athletico Paranaense se impuso por la mínima diferencia y un empate le alcanzará para avanzar a la siguiente instancia, donde esperarán Corinthians o Fortaleza (el Timao ganó 2 a 0 en la ida).
Será un partido especial para el ex volante de la selección argentina. Es que desde su infancia, cuando hizo inferiores en el Globo, Lucho González jamás ocultó su fanatismo por la Academia. A pesar de vestir la camiseta del elenco de Parque de los Patricios, él siempre llevaba las pulseritas con los colores albicelestes y con el tiempo se tatuó el escudo de la entidad de Avellaneda. “Para jugar en Huracán te tenés que sacar todo lo de Racing”, fue la advertencia que le había hecho un barrabrava que se encontraba en La Quemita que le hizo cambiar de postura para tener una faceta más profesional.
A pesar de su sentimiento, el ex volante jamás pudo representar a la Academia y el próximo jueves podrá convertirse en su verdugo. Con pasado en el Ducó, River Plate, Porto, Olympique de Marsella, Al-Rayyan de Qatar y el propio Athletico Paranaense, el ex mediocampista buscará afianzar su nuevo rol de DT, luego de integrar el cuerpo técnico que lideró Eduardo Coudet en Inter de Porto Alegre.
Apodado El Comandante, Lucho también dejó su huella en la selección argentina, donde fue convocado en más de 40 ocasiones, donde alcanzó las finales de la Copa América que organizó Perú en 2004 y Venezuela en 2007. Como jugador del combinado de Curitiba entre 2016 y 2021 y en 2018 se adjudicó la Copa Sudamericana, el mismo título que buscará alzar al frente del plantel.
También trabajó como ayudante de campo del equipo brasileño durante la gestión de Alberto Valentim, pero ahora se pone al frente en sustitución del uruguayo Martín Varini, quien fue despedido el lunes después de encadenar una seguidilla negativa de siete partidos sin victorias en el Brasileirao (el equipo está en la posición 13 de la tabla con 31 puntos y debe sumar para clasificar a las competiciones internacionales de la próxima temporada). El desempeño decepcionante del Athletico Paranaense en el torneo nacional ha llevado a una rápida sucesión de entrenadores, dado que el antecesor de Lucho González dirigió apenas 19 compromisos antes de ser despedido.