Un hombre de 20 años que había sido detenido por presuntamente haber cometido el crimen de Rocío Fabiana Flores, una joven embarazada de 21 años que fue asesinada de un balazo en Mendoza. Mientras que la investigación continúa su curso, la fiscal a cargo de la causa aseguró que no contaba con pruebas que suscitaran que el acusado siguiera privado de la libertad.
Después de haber pasado algunas horas detenido, el único sospechoso de haber baleado a la víctima fue liberado. El joven, cuya identidad se mantuvo preservada, había sido aprehendido el martes pasado en la calle Lugones, ubicada en la localidad de Las Heras, luego de haber sido señalado en varios de los testimonios que recogieron las autoridades judiciales.
Sin embargo, la fiscal Claudia Ríos señaló que los testimonios no eran pruebas suficientes para que fuera imputado en la causa, por lo que decidió liberarlo y desvincularlo del caso momentáneamente. De esta manera, no hay ningún detenido, pese a que informaron que habrían identificado a varios sospechosos producto de los avances que se realizaron en la investigación.
En paralelo, los investigadores confirmaron que el joven contaba con varios antecedentes penales vinculados a delitos como robo agravado, por uso de arma blanca, y por resistencia a la autoridad datado en 2017. Asimismo, plantearon que habrían ido a buscarlo en venganza por la muerte de Flores, pero terminaron por balear el frente de su vivienda al no encontrarlo en el lugar.
Según la información proporcionada por el medio local MDZ, el crimen contaría con al menos dos responsables, debido a que los testigos remarcaron que se habría tratado de dos sujetos que circulaban en una motocicleta. Aparentemente, se trataría de un ataque de sicarios, ya que abrieron fuego con la vivienda en la que se encontraba la mujer sin mediar palabra.
El hecho ocurrió el lunes cerca de las 23 horas en un domicilio ubicado sobre la calle Aristóbulo del Valle al 1676, de Las Heras, cuando la víctima tomaba mate junto a su pareja, Jesús Javier Zamora (27). En ese momento, los agresores dispararon contra la mujer, quien se desplomó en el suelo luego de que una bala impactara en su cabeza.
De manera instantánea, los tiradores se dieron a la fuga del lugar y seguirían sin ser identificados. No obstante, las autoridades plantearon la hipótesis de que el blanco del ataque habría sido Zamora por un presunto ajuste de cuentas. Aunque esta información no habría sido confirmada por el momento, pese a que la pareja de la víctima reconoció que tenía problemas con las personas que balearon su casa.
Momentos más tarde, la mujer fue trasladada de urgencia en una ambulancia del Servicio de Emergencia Coordinado (SEC) hasta la guardia del Hospital Elías Gailhac, en donde fue asistida por el personal médico. La víctima perdió masa encefálica y fue derivada al Hospital Luis Lagomaggiore.
Allí, los médicos le practicaron una cesárea de urgencia, con el objetivo de rescatar al bebé de 25 semanas que se encontraba en gestación, pero murió mientras realizaban la intervención. Finalmente, Flores falleció cerca de la madrugada, debido a la herida fatal que sufrió.
De esta manera, se inició una investigación que quedó a cargo de la Oficina Fiscal 14 de Las Heras. Luego de que la Base de Análisis Criminal revelara que la víctima no contaba con antecedentes penales, sí señalaron que su pareja había estado preso en las cárceles de San Felipe y Almafuerte. Actualmente, el hombre cuenta con una ocupación registrada.
Por este motivo, las autoridades informaron que la pesquisa continuará sobre los nexos existentes que tendría Zamora, para poder dar con el paradero de los asesinos de Flores y su bebé. En paralelo, la Policía Científica trabajó en la escena del crimen, con el objetivo de reunir elementos relevantes para la causa y determinar la mecánica del ataque. Asimismo, buscarán cámaras de seguridad que hayan registrado a los atacantes y faciliten conocer hacia dónde huyeron.