Gonzalo Peillat se encuentra en el ojo de la tormenta tras la controversia desencadenada por su participación en la eliminación de Argentina a manos de Alemania en los cuartos de final del torneo de hockey masculino de los Juegos Olímpicos. El encuentro, que terminó 3-2 a favor del equipo europeo, no solo fue intenso por su desarrollo, sino también por la historia personal del defensor nacido en Argentina y que ahora es pieza clave del conjunto alemán.
Peillat, quien fue campeón olímpico con Argentina en Río de Janeiro 2016, renunció a la Albiceleste debido a un conflicto con la federación local, y luego de obtener la nacionalidad alemana, fue invitado por el entrenador a unirse al elenco teutón. Su presencia en el partido ya había generado expectación, especialmente durante la entonación de los himnos nacionales, donde se capturó su notoria incomodidad.
Pero la controversia surgió cuando Peillat anotó un gol decisivo tras un córner corto, el cual desató un polémico festejo. Abrió los brazos para recibir la felicitación de sus compañeros y lanzó un puñetazo al aire, lo que originó una ola de críticas en la red social X. Una vez finalizado el cotejo, el defensor, que jugó ocho años con el combinado argentino y anotó 176 goles, se mostró desafiante.
“Argentina es un país bastante futbolero, creo que lo relacionan por ese lado. Se hubieran puesto del mismo lado cuando sabían que todas las cosas estaban mal y no lo hicieron; hoy la gente que está sentada en el sillón de la casa critica lo que uno obtuvo, ¿qué le voy a decir?”, justificó en diálogo con TyC Sports. “Cada uno es dueño de su vida y toma las decisiones que quiere, yo en el momento que representé a Argentina lo hice de la mejor manera”, añadió.
Pero fue durante su aparición en TV Pública, cuando el deportista, de 31 años, apeló a un viejo exabrupto de Maradona. “Hay muchas cosas que las leo, pero qué sé yo. Hay que hacer mente fría: decir no importa y seguir para adelante. Cuando tomé la decisión supe que iba a haber un 50% de gente que le iba a gustar y un 50% que no, pero al final es mi vida. Al que le guste bien y al que no le guste sorry, como dijo Maradona: ‘Que la sigan chupando’”, soltó, ante la incredulidad de la periodista Sofía Martínez, que intentó frenarlo. “Bueno, bueno, bueno”, esbozó, corriendo el micrófono.
Pues bien, tras un par de horas de difusión de la entrevista, la cronista se animó a dejar su opinión. Lo hizo con una frase con la que sentó postura: “Lo único difícil de asimilar es citar al Diego con la camiseta alemana”. Los germanos fueron grandes adversarios de Pelusa a lo largo de su extensa carrera en la selección argentina. De hecho, jugó dos finales del mundo contra ellos: se impuso 3-2 en la definición de México 1986 y cayó 1-0 en el polémico cierre de Italia 90, por aquel gol a partir de un discutido penal sancionado por el árbitro Edgardo Codesal.
La frase a la que aludió Peillat fue pronunciada por Maradona cuando clasificó, como entrenador de la Albiceleste, al Mundial de Sudáfrica 2010, con una victoria 1-0 ante Uruguay en el estadio Centenario. El desahogo en medio de las críticas llegó durante su icónico abrazo con Carlos Bilardo, en ese momento, director de Selecciones Nacionales.
Luego de ofrecer su mirada, Martínez compartió una reflexión del tenista Gustavo Fernández, también en X: “No se olviden de que atrás de los deportistas hay personas, y nunca se sabe el alcance y las repercusiones que puede tener este tipo de odio. Gritó el gol, actuó de formas que, en mi vara, no haría. Pero no hay necesidad de esto. Con el tiempo, él solito se va a arrepentir”. “Coincido con Gusti”, cerró Sofía.