Este lunes, horas después de que personal de la Sub DDI Tigre de la Policía Bonaerense detuviera a los dos acusados de asesinar a Martina Schiapelli, la joven de 21 años que murió ayer domingo a la madrugada tras ser atropellada en medio de una violenta pelea que se desató a la salida del boliche Tropitango, en la localidad de General Pacheco, se conocieron imágenes que muestran cómo fue la fuga de F.G.G., de 34 años, y su acompañante, A.E.R., de 23.
A bordo de un Fiat Palio color gris, los presuntos asesinos circularon por la zona norte del Conurbano hasta llegar a San Miguel Oeste, donde, suponen investigadores, abandonaron e incendiaron el vehículo.
La grabación, tomada por las cámaras de seguridad de la Municipalidad de Tigre, comienza con la aparición en escena del auto en el que viajaban los sospechosos, que en ese momento circulaba por la colectora Este de la autopista Panamericana. Mientras tanto, decenas de personas realizaban una extensa fila para ingresar a la discoteca.
Tras atropellar, matar y arrastrar por el asfalto a Martina, los sospechosos emprendieron la fuga a bordo de un Fiat Palio color gris en dirección hacia el municipio de Malvinas Argentinas. En medio del recorrido, y quizás producto de los nervios que le generaba la posibilidad de ser detenido, F.G.G. no frenó a tiempo en una bocacalle e impactó el chasis contra la cinta asfáltica, lo cual provocó una serie de chispazos provenientes de la parte inferior del auto.
Con el propósito de alejarse lo más posible de la escena del crimen, F.G.G. infringió todo tipo de normas de tránsito. Incluso, dobló en una avenida con el semáforo en rojo, a pesar de la presencia de una garita policial.
Finalmente, la Policía encontró el Fiat Palio color gris de los atacantes en el cruce de las calles Florencio Sánchez y Discépolo, en San Miguel Oeste: los sospechosos lo dejaron abandonado luego de incendiarlo en su totalidad.
Las imágenes obtenidas por las cámaras de seguridad municipales fueron determinates para reconstruir el recorrido que realizaron los asesinos de Martina durante la madrugada del domingo, y luego concretar sus detenciones. También para destapar la coartada del conductor, que minutos antes de las 9 de la mañana se presentó en la comisaría 3a de José C. Paz y reportó el supuesto robo de su automóvil. En su declaración, denunció que ese mismo día, a la 1 de la madrugada, dos hombres lo habían interceptado en las calles Salvatori y Washington del citado municipio bonaerense y le sustrajeron su teléfono celular y el Fiat Palio color gris en el que circulaba, el auto empleado en el crimen de Martina.
Al verificar los datos del auto, los agentes constataron que el vehículo, con domicilio radicado en San Miguel Oeste, era propiedad de la pareja de F.G,G.
Una vez analizadas las imágenes de las cámaras de seguridad de Tropitango, los investigadores corroboraron que el conductor del vehículo, su novia y otros amigos habían estado en el lugar durante la madrugada.
Las filmaciones, además, permitieron establecer que el Fiat Palio en cuestión ya se encontraba en inmediaciones del local bailable a las 00:45, lo cual dio cuenta de que la denuncia realizada por uno de los sospechosos era falsa. También se verificó que cerca de las 5:50, el rodado en cuestión se perdió dentro del partido de San Miguel, donde fue visto por última vez en el cruce de Primera Junta y Ruta 8.
De esta manera, la coartada de F.G.G. quedó expuesta ante la Policía: inventó un robo para desorientar a los investigadores, pero su intento fue en vano.
Así, lo arrestaron mientras caminaba cerca de su casa. Cuando fue esposado, aseguró que no quiso matar a la víctima, que todo fue un accidente.
El caso quedó en manos de la doctora Karen Bianchi, fiscal titular de la UFI Descentralizada de El Talar, que imputó a los detenidos por homicidio.
