Tras el viaje a México y su posicionamiento por el escándalo que involucra al ex presidente Alberto Fernández -acusado de violencia de género contra la ex primera dama Fabiola Yañez- Cristina Kirchner se prepara para lo que será su declaración en el marco del juicio por el intento de magnicidio perpetrado en su contra el 1 de septiembre del año 2022. La ex presidenta está llamada a declarar el miércoles 14 de agosto. En la antesala de su presentación, el kirchnerismo intentará ganar la agenda de la conversación política que hoy por hoy tiene al peronismo en el centro de la escena producto de la situación de Fernández. “La línea nuestra es saber quién mandó a matar a Cristina”, admiten desde el entorno de la ex presidenta. En ese marco, se descuenta que -cuando declare- la ex presidenta hará hincapié en ese tema y también cuestionará el accionar judicial por no seguir con profundidad “la pista Millman”.
Más allá de la estrategia judicial, el caso también está atado a la discusión política. En ese esquema en los siguientes días, distintas figuras referenciadas en la ex presidenta saldrán a intentar ganar la agenda con este tema y, al igual que CFK, reclamarán que se haga foco en los autores intelectuales del ataque perpetrado por Fernando Sabag Montiel, que le gatilló dos veces en la cabeza -sin éxito- a la ex presidenta mientras saludaba a un grupo de militantes que la esperaba en la puerta de su domicilio del barrio porteño de Recoleta.
“Cristina Fernández de Kirchner no es sujeto de derecho para la Justicia argentina. Siempre será acusada, pero nunca víctima. La persiguen por lo que hizo bien, por todo lo que le dio al pueblo argentino”, le remarcó a Infobae la intendenta de Moreno, Mariel Fernández.
Fernández fue una de las dirigentes que acompañó a Cristina Kircher durante su viaje por México. Las actividades de la ex mandataria incluyeron distintas disertaciones y encuentros como el que tuvo con la presidenta electa de México, Claudia Schenbaum. En todas, la acompañó la intendenta de Moreno; además de su par de Quilmes, Mayra Mendoza; la senadora nacional por Mendoza, Anabel Fernández Sagasti; el senador nacional por Neuquén, Oscar Parrilli y la ex diputada nacional e integrante del Instituto Patria, Claudia Bernazza.
“Lo más fácil será acusar a “Los Copitos” vendedores de nubes de azúcar, ¿de película, no? Nosotros y nosotras queremos saber quién mandó a matar a Cristina”, planteó Fernández. También pidió “que la jueza (María Eugenia) Campuchetti le explique a la sociedad qué pasó con el celular secuestrado de (Fernando) Sabag Montiel, que apareció borrado y roto mientras estaba en su custodia”.
En La Cámpora, el vocero principal de la estrategia política contra el desarrollo del juicio por el atentado contra CFK es el ministro de Justicia y Derechos Humanos de la provincia de Buenos Aires, Juan Martín Mena. “En este juicio se le han negado sistemáticamente pruebas a Cristina y en paralelo hubo un intento explícito de no investigar la pista en torno a Gerardo Milman, a quien intentan encubrir”, planteó ante Infobae el funcionario de la gestión de Axel Kicillof.
En este marco, el ministro bonaerense aseguró también que “la causa del financiamiento del atentado está paralizada” y que “si los hermanos Caputo no financiaron a Revolución Federal para que le den un tiro en la cabeza a CFK, deberían poder explicar qué estaban haciendo”. La línea de La Cámpora es contundente: plantean que es el poder quién busca correr a Cristina Kirchner de toda actividad política.
Días atrás, la intendenta de Quilmes también había marcado que “están dejando afuera de la investigación a los autores intelectuales, los vínculos políticos y el financiamiento del atentado”.
La propia ex mandataria viene planteando en distintas intervenciones el modo de que se lleva adelante la investigación por el atentado. Hasta el cierre de esta nota no estaba definido que La Cámpora de manera orgánica vaya a hacer una movilización hacia Comodoro Py el próximo miércoles. En los días previos sí hubo cierta campaña en la calle con pegatinas de afiches y en redes sociales con la pregunta: “¿Quién mandó a matar a Cristina?”. Se descuenta además que los diputados de Unión por la Patria no asistan al pedido de sesión que hicieron desde La Libertad Avanza y el PRO para el próximo miércoles. La declaración de CFK es uno de los argumentos.
“Seguramente haya gente y compañeros que quieran acompañarla como sucedía en la puerta de su casa, pero por el momento no vamos a hacer una marcha a Tribunales”, desliza una fuente de La Cámpora. Existe la posibilidad de que ese día la ex presidenta se cruce con quien ya se declaró como autor material en el intento de asesinato: Fernando Sabag Montiel.
La presencia de Cristina ante el tribunal que investiga el intento de asesinato y lo que será su declaración también será materia de análisis al interior del universo peronista. El próximo miércoles, la ex mandataria cobrará centralidad dentro de un espacio político convulsionado, tras la divulgación de las imágenes de Yañez y que dejó al peronismo en estado de conmoción. “Estamos muy shockeados, es una denuncia gravísima”, fue, por ejemplo, lo primero que dijo Kicillof sobre el caso. Fue desde La Rioja donde acompañó al gobernador de esa provincia, Ricardo Quintela, en la jura de la nueva constitución provincial.
Pese a su intención, la estrategia diseñada por el kirchnerismo contrasta con lo que días atrás fundamentó Capuchetti. Como dio cuenta Infobae, la magistrada a cargo de la investigación rechazó el pedido de la querella para iniciar nuevas diligencias detrás de la llamada pista Milman y la necesidad de poner énfasis en el rol del diputado nacional del PRO y ex secretario de Seguridad de la Nación. “No le asiste verdad a la querella cuando asegura que no se han desplegado medidas para esclarecer este asunto”, resolvió Capuchetti resaltando que hasta ahora no se confirmó la versión del asesor del Frente de Todos, Jorge Abello, quien aseguró haber oído al diputado del PRO Gerardo Milman decir horas antes del ataque “cuando la maten yo estoy camino a la costa”.
En una última resolución la jueza también advierte que “el remedio procesal de la querella tiende a seleccionar antojadizamente fragmentos de la prueba incorporada, y por medio de su descontextualización, apunta a crear un marco fáctico distinto de aquél que el Ministerio Público Fiscal logró establece”. Capuchetti tiene un teléfono de Milman que el propio legislador entregó, aunque no se puede abrir. Es un dispositivo que el diputado adquirió tras el intento de asesinato. En este marco, afirmó que el equipo anterior lo perdió. Además de Sabag Montiel, por el intento de asesinato están detenidos Brenda Uliarte y Nicolás Carrizo