“Si buscan provocación no lo vamos a permitir. Nuestro objetivo siempre es el mismo nunca cortar las calles”. Con esa frase, dicha ante Infobae, la ministra de Seguridad de la Nación, Patricia Bullrich, apuntó contra los gremios de la CGT vinculados al kirchnerismo; las dos CTA; piqueteros de izquierda; organizaciones políticas alineadas a esa ideología y, entre otros, movimientos sociales nucleados en la Unión Trabajadores de la Economía Popular (UTEP) que el miércoles movilizaran al Congreso contra la Ley Bases que comenzará a tratarse en la Cámara alta.
“Hay una decisión política muy férrea que todos conocen, las calles están para circular y las plazas para protestar, recordó la integrante del gabinete de Javier Milei.
“Si el objetivo es provocar el protocolo (antipiquetes), entonces pondremos más fuerza para evitar que lo hagan. Si están todo el día, van a tener que estar ordenadamente”, anticipó.
Según Bullrich, “el tipo de operativo que vamos a realizar todavía no está planificado”, de todos modos, este medio pudo reconstruir que, como en situaciones similares, se movilizarán las cuatro fuerzas federales: Gendarmería Nacional, Prefectura, Policía de Seguridad Aeroportuaria (PSA) y Policía Federal Argentina (PFA). Cada una de ellas estará apoyada por sus equipos tácticos y especiales. Los grupos de Infantería, camiones hidrantes y brigadas motorizadas.
El Palacio Legislativo estará vallado. En el perímetro interior habrá un refuerzo policial, sobre todo en la explanada que está ubicada a la altura de la Avenida Entre Ríos al 1.000, al igual que en la entrada de los senadores y asesores, en Hipólito Yrigoyen 1849. También estará vallado y reforzado el ingreso del edificio sobre la Avenida Rivadavia entre Callao y Combate de los Pozos.
Minutos después que algunos los sindicatos que integran la CGT, CTA de los Trabajadores, la CTA Autónoma y otras organizaciones, como de derechos humanos, encabezadas por Taty Almeida de Madres de Plaza de Mayo – Línea Fundadora- confirmaran la movilización contra la Ley Bases, la ministra de Seguridad ratificó públicamente que se activará el protocolo antipiquete “como se hace siempre”.
Antes, dirigentes piqueteros como Eduardo Belliboni, del Polo Obrero; Silvia Saravia de Libres del Sur; Alejandro Gramajo, de la UTEP; Juan Carlos Alderete, referente de la Corriente Clasista y Combativa (CCC); Celeste Fierro, diputada de la Ciudad (MST-FIT Unidad); Alejandro Bodart, dirigente nacional del MST-FITU y Mónica Sulle, del MST-Teresa Vive, entre otros, habían llamado a “Rodear el Congreso” hasta “que se caiga la Ley Bases y todo el plan Milei”. También pidieron que la CGT llame a un paro general con movilización para ese día, un hecho que no sucederá.
El que se mostró más activo y contestatario ante el tratamiento del proyecto de ley, que ya tiene media sanción de diputados -pero que sufrirá modificaciones-, fue el camionero Pablo Moyano y uno de los triunviros de la principal central obrera del país. Afirmó que era “una necesidad y una obligación estar el día miércoles rechazando esta Ley Bases que destruye a las industrias. Va a destruir a los transportes y los trabajadores vuelven nuevamente a pagar Ganancias”.
El líder gremial también apuntó a los senadores: “O se convierten en héroes de la Patria o van a ser los traidores, porque van a perjudicar a nuestro pueblo”.
El camionero pretendía que toda la CGT se encolumnara detrás de él y movilizaran representantes de los gremios mayoritarios. Pero las fracturas internas son muy profundas y, por ahora, ganan la pulseada los popes dialoguistas.
Por otro lado, la Asociación Trabajadores del Estado (ATE) ratificó ayer el paro general de estatales de este miércoles 12, que será acompañado por una movilización al Congreso de la Nación.
El gremio que conduce el kirchnerista Rodolfo Aguiar había definido la medida de fuerza durante el último Congreso Ordinario con participación de todas las seccionales de la organización.
Fue después de la exposición de Moyano que Bullrich anticipó, una vez más, que se hará cumplir en todo su rigor el protocolo anti piquetes que viene implementando el Gobierno desde el 20 de diciembre contra los cortes de calles y manifestaciones que corten arterias y accesos: “Que no se les ocurra tirar una piedra, que no se les ocurra levantar una baldosa”, y les advirtió que “intenten lo que quieran, el rumbo no se mueve”.
Las políticas económicas y sociales de la administración Milei consiguió una foto que en años anteriores era difícil de ver. Al co-secretario de la CGT Pablo Moyano y al ex precandidato presidencial de Unión por la Patria y referente del Movimiento de Trabajadores Excluidos (MTE) Juan Grabois, un dirigente cercano al kirchnerismo. En el encuentro, según refiere desde su red social X InfoCamioneros, el líder gremial y el también referente de Argentina Humana, dieron una imagen de unidad contra la posible aprobación de la “Ley de Bases y Puntos de Partida Para la Libertad de los Argentinos” en el Senado.
En sus intervenciones públicas, Grabois argumentó que la iniciativa que el 12 de junio comenzará a debatirse en la Cámara Alta “no tiene un solo artículo a favor de la gente, un solo artículo a favor del país, un solo artículo a favor del pueblo”.
“Si buscan provocación no lo vamos a permitir”, le dijo Bullrich al ser consultada por la “multitudinaria marcha frente al Congreso de la Nación”, que prometen los organizadores de diferentes ramas políticas y sociales.
Entre el 31 de enero y el 2 de febrero, mientras se debatía, a fines de mayo, la denominada Ley Ómnibus en la Cámara de Diputados de la Nación, se registraron tres días de fuertes incidentes en los alrededores del recinto.
Ocurrió en momentos en que los manifestantes de izquierda, encabezados por el Polo Obrero, el MST y el FOL, entre otras organizaciones, se enfrentaron a las fuerzas federales que intentaron evitar que los piqueteros y dirigentes bajaran de la Plaza Congreso y cortaran la Avenida Rivadavia, Callao y Entre Ríos, entre otras arterias. En medio de la refriega aparecieron encapuchados con mochilas cargadas de piedras y combustible para quemar contenedores. Los agentes respondieron con gas pimienta y balas de goma. Hubo heridos -entre ellos periodistas- y más de 20 detenidos que después fueron liberados.
El 6 de febrero, el jefe de gobierno porteño, Jorge Macri, presentó ante la justicia las imágenes de los incidentes y valuó los destrozos y el desorden en más de $106.890.000.
El desacuerdo en el recinto terminó con una derrota del oficialismo que retiró el proyecto.
Un mes después, y modificaciones mediante, diputados dio media sanción a la Ley Bases. También hubo concentración frente al Palacio Legislativo pero las columnas piqueteras eran exiguas, el despliegue de efectivos también. El clima que se vivía no registró la tensión No hubo corridas, palazos ni gases. Solo alguna escaramuza ¿Qué sucederá ahora?
Sobre el tema, Bullrich aseguró: “Dónde aparecen, cuando aparecen en cualquier lugar, siempre respondemos, hemos sido siempre ordenados, lo hemos hecho siempre sin violencia”. Lo hacía en referencia a que las fuerza de seguridad solo responden a las agresiones o al desacato a las ordenes que se realizan para hacer cumplir el protocolo.
La ministra también destacó: “Hoy para la ciudad de Buenos Aires y muchos puntos del país, para la sociedad han cambiado, hay orden, hay previsibilidad, la gente va a trabajar y llegan a la hora que pretenden hacerlo” y reforzó: “Nuestro objetivo siempre es el mismo nunca cortar las calles”.