Franco Spitale fue protagonista de un milagro durante el Millionaire Maker, uno de los torneos más emblemáticos de la Serie Mundial de Póker a nivel internacional (WSOP). El argentino hizo historia al ganar este prestigioso certamen en una definición infartante y totalmente albiceleste.
El marplatense, fanático de Boca Juniors, se convirtió en un ícono del póker nacional al quedarse con un premio millonario. En una final épica, Spitale tomó una decisión que quedará en la memoria de todos los aficionados: decidió llevar puesta una camiseta de la Selección argentina con el número 11 de Ángel Di María y, visiblemente emocionado, invocó a Lionel Messi para que lo guiara hacia la victoria.
En el video que circuló a través de las redes sociales se pudo palpar la tensión que se vivía en el ambiente con la última mano decisiva. El argentino tenía un As y un 10 en mano, mientras que su rival ya contaba con un par de 2, lo que hasta ese momento, hacía que su oponente tuviera un 51% de probabilidades de ganar, mientras que él un 48%. Tras hacer sus apuestas, e ir al All In, las cartas comenzaron a revelar su destino.
Fue en ese momento cuando se dirigió a una esquina donde estaban reunidos sus amigos y todos comenzaron a corear el nombre del capitán de la selección argentina como si estuvieran presenciando un encuentro mundialista en Qatar.
“Estamos a un 10. Que venga un Maradona. Sería épico cerrar con un Maradona como campeón al señor Spitale”, decía el relator mientras esperaba que se pusieran las cartas sobre el tapete. La primera mano arrojó un 5, un 2 y un 10. Si bien le sirvió a ambos, Carey se vio más beneficiado ya que en ese momento pasó a tener una pierna de dos, ante un par de diez de Spitale, lo que dejó un porcentaje de triunfar de 97 a 3 para el sudamericano.
Con solo un 3% de posibilidades de ganar la mano, la incertidumbre invadió el lugar. Por un instante cesaron los gritos, esperando expectantes la siguiente tirada. La salida de un As renovó las esperanzas de los argentinos. Spitale ahora pasaba a tener un 9% de probabilidades contra un 91% al tener un doble par. Más que nunca el marplatense y sus amigos comenzaron a gritar por el ex Barcelona ya que un 10 o un As le darían el triunfo por full.
“Messi, Messi”, resonaba como un eco en el recinto, hasta que finalmente se reveló la última carta: un As de diamantes. Un Full de ases y dieces con el que derrotó el full de su rival, compuesto por 2 y ases. La euforia estalló en el salón, al salir el último naipe, los presentes lo celebraron con un “¡Dale campeón!”, evocando el momento en que Lionel Messi levantó la Copa del Mundo.
Franco Spitale se alzó con el premio mayor de 1.2 millones de dólares (1.250.125) y, al finalizar el juego, no dudó en compartir su gratitud y emoción a través de las redes sociales: “Hubo magia, algo raro pasó, estaba clarísimo para los presentes. En algún momento me sentaré a escribir. Es mi sueño desde pibe, y poder haberlo vivido y compartido así es directamente cine, no puedo más.”
La repercusión fue inmediata. “Gracias por todo el cariño que me hacen llegar y con el que alentaron y pidieron con nosotros. Lo sentí”, reiteró en su cuenta de Instagram.
Spitale, visiblemente conmovido, también dedicó unas palabras a quienes lo apoyaron en cada momento decisivo: “Ellos me dieron la energía para continuar cuando las cosas no estaban saliendo del todo bien. No hubiera llegado tan lejos sin su energía y poder. Me cuesta creerlo, ya que es demasiado. Soñé con esto toda mi vida. Le había prometido a mi pequeña hija Emma que el próximo trofeo iba a ser para ella, así que este brazalete es para ella”.
La edición del Millionaire Maker de este año no solo vio a Franco Spitale alcanzar la gloria, sino que también demostró el creciente interés y participación en el póker, con un número récord de 10.939 registros.
Con esta victoria, Franco Spitale no solo se lleva un premio económico significativo sino que también se consagra como uno de los grandes del póker argentino, un deporte que cada vez tiene más adeptos y figuras destacadas en el ámbito internacional.