Sigue la gira internacional del Inter Miami por diferentes partes del mundo como preparación para lo que será el estreno de la nueva temporada de la MLS. Después de su visita a Hong Kong, el equipo rosa desembarcó en Tokio, capital de Japón, de cara a lo que será el duelo del próximo jueves ante el Vissel Kobe, el conjunto que se hizo famoso por contar entre sus filas con Andrés Iniesta.
Más allá de la llegada del conjunto estadounidense, todas las miradas estuvieron puestas en Lionel Messi. El astro argentino no participó del duelo ante un combinado de la liga de Hong Kong, lo que generó indignación y enojo en los aficionados que pagaron una entrada para verlo jugar. El capitán de la selección argentina tuvo su primera aparición pública en la ciudad que viene de ser sede de los Juegos Olímpicos y aclaró el por qué de su baja.
“Lamentablemente, cosas del fútbol. En cualquier partido puede pasar que tengamos una lesión. A mí me pasó. No pude estar en el partido de Hong Kong y es una lástima, porque siempre quiero participar y quiero estar”, fue la primera reflexión de Leo sobre su ausencia.
“Más cuando se trata de estos tipos de partidos, que viajamos desde tan lejos y que la gente está tan ilusionada por ver nuestros partidos. Ojalá podamos volver a jugar otro partido en Hong Kong y pueda estar presente, como lo hago siempre que puedo. La verdad una lástima que no haya podido participar”, agregó en relación al tema.
Previamente, Messi dio detalles de cuándo se produjo la lesión que lo marginó del amistoso en territorio asiático. “La verdad es que fue mala suerte que no pudiera jugar en Hong Kong. En el primer partido, en Arabia Saudí, sentí una lesión en el abductor y por eso me sacaron. Jugué el siguiente partido para ver cómo me sentía, porque me hicieron una resonancia magnética y me dijeron que tenía edema en el aductor, que lo tenía cargado, pero no había lesión. Por eso intenté y probé. Tuvimos el entrenamiento a puertas abiertas y salí por la gente que había, Pero la molestia seguía estando y se me hacía muy dificil jugar”, relató el número 10 sobre el periplo desde su llegada al país asiático.
La situación de la no participación del capitán de la selección argentina campeona del mundo generó todo tipo de reacciones en el público hongkonés. La transmisión local de TV mostró que fueron varios los aficionados que se retiraron varios minutos antes del final del juego que terminó con el triunfo del Inter Miami por 4-1.
Por su parte, otros decidieron tomar medidas más drásticas y abuchearon cuando el árbitro decretó el final del encuentro. “¿Dónde está Messi?” y “reembolso”, fueron los cánticos que más se escucharon en el estadio. Es más, el propio David Beckham recibió la reprobación de los presentes en las tribunas de la cancha cuando tomó el micrófono para hablarles a los miles de simpatizantes que concurrieron a ver al club de su propiedad.
Los hinchas pagaron entre 113 a 623 dólares norteamericanos -sin contar los precios de reventa- para ver al histórico número 10 del Barcelona. Frente a la ausencia de Messi, las autoridades locales emitieron un comunicado tras el partido. “El Gobierno está muy decepcionado con la disposición de los organizadores, al igual que los aficionados, por el hecho de que Messi no pueda jugar en el partido de exhibición de hoy”, indicó un fragmento del reporte en el que también apuntaron a los organizadores del evento.
El líder de Hong Kong John Lee Ka-chiu estuvo presente y el medio asiático South China Morning Post confirmó que se enteró poco antes del final del partido de su ausencia. Es más, el secretario de Cultura, Deportes y Turismo, Kevin Yeung Yun-hung, aclaró que los funcionarios del gobierno fueron notificados “10 minutos antes de que terminara el partido” que Messi no jugaría.
“Venimos haciendo una gira de muchos partidos seguidos, de muchos viajes y cambios horarios, pero intentaremos prepararnos de la mejor manera para afrontar este partido, creciendo y poder sacar cosas positivas para lo que se viene”, dijo sobre el próximo amistoso.
El próximo jueves, Messi y compañía jugarán su último encuentro de preparación fuera de los Estados Unidos, pero no será la prueba final. Antes del debut por la Major League Soccer, el 21 de febrero ante el Real Salt Lake, el rosarino enfrentará al equipo que lo vio nacer en el fútbol, Newell’s, el jueves 15 en Miami.