La Copa de la Liga Profesional está a horas de tener su patada inicial y, como suele suceder en cada ventana de transferencias, hay un importante movimiento de futbolistas que abandonan el ámbito local de un torneo al otro. Los ojos del mundo están sobre Argentina desde la consagración en el Mundial de Qatar y equipos de todo el planeta apuestan por el talento nacional.
La experiencia es una cualidad que sólo se puede conseguir con minutos dentro del campo de juego y es por eso que hubo varios delanteros que decidieron llevar sus goles del otro lado de la frontera. Así es el caso de Lucas Pratto que, tras un breve capítulo en Defensa y Justicia, rescindió su contrato y firmó por un año con Olimpia de Paraguay con el fin de relanzar su carrera.
Una situación polémica fue la de Salomón Rondón por su inesperada decisión de irse de River Plate, donde era titular e incluso resignando una importante cantidad de dinero, para seguir su trayectoria en el Pachuca de México. El ex Málaga, Newcastle y Everton era uno de los extranjeros con mayor renombre en el certamen argentino.
Otro controversial capítulo del mercado de pases tuvo al uruguayo Martín Cauteruccio como protagonista ya que el mismo futbolista se consideró libre de Independiente por falta de pago y encontró su siguiente camiseta en Perú al firmar por un año en Sporting Cristal.
En la línea de delanteros históricos que perderá el fútbol argentino hay que sumar el apellido de Gabriel Hauche, quien arrancará el 2024 en Chile. El jugador finalizó su contrato con Racing, optó por no renovar y firmó en Unión La Calera.
También hubo casos de figuras de sus clubes que dieron un salto en su carrera. Uno de los ejemplos más recientes es Augusto Batalla, que luego de tener un año positivo en el arco de San Lorenzo, emigró al Granada de España con la posibilidad de quedarse de manera permanente en Europa: se negoció un préstamo sin cargo y con opción de compra que se transforma en obligación logra la permanencia en La Liga.
Dos futbolistas que eran importantes en sus equipos y se fueron son Lautaro Gianetti de Vélez a Udinese y Matías Cóccaro de Huracán al Montreal Impact de la MLS.
En el rubro de las promesas que perderá el certamen nacional, hay que mencionar a Agustín Ojeda (19 años): Racing Club vendió a uno de sus talentos a Estados Unidos. El New York City desembolsará 7.5 millones de dólares por el 90% del pase. El jugador firmó contrato hasta diciembre de 2026 con opción a uno más.
Y si de talentos hablamos, es una obligación destacar a uno de los jugadores sobre el que más expectativas existen. Valentín Barco activó su cláusula de salida valuada en 9.5 millones de dólares por la totalidad de la ficha, que pertenecía a Boca Juniors, para irse a la Premier League bajo la camiseta del Brighton Hove & Albion con contrato hasta mediados de 2029.
Junto con el Colo, el que armó las valijas fue Julián Malatini para irse de Defensa y Justicia y firmar con el Werder Bremen de Alemania: todavía no se conocen los números oficiales de la operación.
Vélez Sarsfield se mostró muy activo en el mercado y una de las decisiones que tomó fue la venta de Gianluca Prestianni al Benfica de Portugal a cambio de 9 millones de euros. Cabe destacar que 6.5 millones de la moneda europea le quedan al Fortín más otro porcentaje a cobrar mientras se cumplan ciertos objetivos. Por el lado del joven de 17 años, acordó un vínculo por cinco años y medio.
Tras varios días de negociación, Benjamín Rollheiser dejó Estudiantes para pegar el salto al Viejo Continente también con los colores del Benfica a cambio de 9.5 millones de euros por el 90% de la ficha. En paralelo, San Lorenzo acordó la salida a Europa de un apellido que aportó mucho al equipo en el último tiempo: Gastón Hernández viajó al Olympiakos de Grecia y en Boedo entraron 4 millones de la moneda estadounidense, además de un 20% por si existe otra venta del defensor en un futuro próximo.
El mercado brasileño siempre está atento a lo que sucede en Argentina para encontrar refuerzos y la actual ventana de transferencias no fue la excepción. Dentro de los apellidos significativos que se mudaron al país vecino resaltan las idas de Rodrigo Garro desde Talleres al Corinthians a cambio de 5.2 millones de dólares, la operación de Nicolás De La Cruz al Flamengo con River Plate embolsando 16 millones de la misma moneda y Leonardo Godoy saliendo de Estudiantes de La Plata por 4 millones rumbo a Athletico Paranaense.
Tampoco hay que olvidarse del caso Jamilton Campaz, que regresó a Gremio luego de que termine su préstamo en Rosario Central, aunque el colombiano no engrosaría la lista de salidas: todo parece indicar que en las próximas horas volverá a ser futbolistas del Canalla tras destrabar el conflicto.