Este jueves, la selección de fútbol de Bolivia se enfrentó a Venezuela en un partido correspondiente a la fecha 7 de las Eliminatorias Sudamericanas. El encuentro cobró notoriedad por una inusual adaptación en el Estadio Municipal de El Alto. Para cumplir con los requisitos de la Conmebol y la FIFA, se instalaron butacas desechables de telgopor (polietileno-acetato de vinilo) ante la imposibilidad de contar a tiempo con asientos numerados definitivos.
El Estadio Municipal de El Alto, situado a 4093 metros sobre el nivel del mar, fue el elegido para albergar este encuentro, en lugar del tradicional Estadio Hernando Siles de La Paz (a 3.581 metros). La Federación Boliviana de Fútbol (FBF) y la Alcaldía de El Alto ejecutaron varias reformas en el estadio para cumplir con los estándares internacionales, pero la retención de las butacas en la aduana forzó una solución temporal inusitada.
Fernando Costa, presidente de la FBF, detalló en declaraciones recogidas que la alcaldía se encargará de instalar las butacas definitivas dentro de unos meses. Mientras tanto, las butacas desechables permitirán cumplir con los requerimientos temporales. “Estos asientos van a estar debidamente numerados, así que cumplimos a cabalidad con la norma”, subrayó Costa.
El enfrentamiento contra la Vinotinto marcó una jornada inédita para la selección boliviana no solo por el cambio de sede, sino también por las adaptaciones improvisadas que generaron curiosidad y comentarios en el ámbito deportivo. Estas modificaciones del recinto deportivo no pasaron desapercibidas en las redes sociales y muchos usuarios dejaron insólitas reacciones al respecto.
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