Manchester United inició un importante cambio en su estructura directiva con la contratación de Omar Berrada como su nuevo director ejecutivo, quien previamente desempeñó un papel clave en el éxito de su acérrimo rival: el Manchester City. La incorporación del dirigente está inmersa en una reestructuración comandada por Sir Jim Ratcliffe y su empresa Ineos, que recientemente adquirió una participación del 25% en el club.
La reciente incorporación se ganó una prestigiosa reputación en los actuales campeones de la Premier League y la Champions League en los roles de director comercial y luego como director de operaciones de fútbol. Ahora encarará el mismo liderazgo en el United tras la salida del anterior CEO, Richard Arnold, en noviembre pasado. El interinato fue asumido por Patrick Stewart, jefe legal del club.
Aunque los traspasos entre City y United no son comunes, especialmente a nivel de ejecutivos de alto perfil, este movimiento representa un suceso notable y puede ser percibido como un robo estratégico. Berrada deberá comenzar en su nueva posición durante el verano, justo antes de la nueva temporada.
La institución dejó claro en su comunicado que el fichaje de Berrada es un paso fundamental para recuperar la primacía en el terreno de juego y se espera que su experiencia y liderazgo contribuyan a una nueva era en Old Trafford. El enfoque volverá a estar en el fútbol y el rendimiento como eje de la gestión del club.
Berrada llegó al Manchester City proveniente del FC Barcelona, aportando su conocimiento en maximizar los ingresos comerciales y económicos del grupo empresario que invirtió de manera récord en el fútbol. Su liderazgo estará igualmente dividido entre las cuestiones deportivas y comerciales, además de tener un asiento en el consejo de administración del equipo.
A pesar de la trascendencia de Omar y su papel fundamental en la firma del traspaso de Erling Haaland al los Cityzens, la estructura directiva de este último, compuesta por Txiki Begiristain, Brian Marwood y el CEO Ferran Soriano bajo la presidencia de Khaldoon al Mubarak, se considera suficientemente sólida para no verse afectada significativamente por su partida.
La sensación en el Manchester City es agridulce, pero sin resentimientos, reconociendo el deseo de Berrada de enfrentar un nuevo desafío profesional. No se teme por la continuidad y eficacia de las operaciones del club, gracias al equipo directivo que seguirá adelante. Los logros de Berrada en el City y su experiencia previa en España hacen de su fichaje un golpe importante para el United, que busca renovarse y volver a los primeros lugares tanto en la Premier League como a nivel europeo. Este movimiento estratégico podría ser un claro indicativo de las nuevas corrientes de cambio y ambiciones en Old Trafford. Patrick Stewart seguirá como CEO interino de Manchester United hasta que Berrada se una oficialmente al equipo.
