- Creep
- La bruja
- El apóstol
- Bárbaro
No es novedad que Netflix cuenta con un catálogo extenso en materia de películas y series de terror. Pero mientras una cantidad de producciones logran un pico de popularidad y se posicionan en los rankings de la plataforma, otros títulos destacados han pasado inadvertidos por algunos espectadores o no han recibido el reconocimiento que merecen.
Hoy en Malditos Nerds arrojamos luz con películas para los aficionados al cine de género que buscan algo diferente. Desde el minimalismo perturbador de Creep hasta el terror psicológico de Bárbaro, estas opciones alejadas del cine mainstream prometen llevar el suspenso y la tensión a otro nivel.
Creep (2014) – Dir. Patrick Brice
Una de las primeras películas que podemos encontrar en el catálogo de Netflix es Creep, una ópera prima en formato metraje encontrado que toma lo peor de algunas malas experiencias de Craigslist y lo mezcla con elementos de películas como Misery (1980). Su historia sigue a un camarógrafo freelance con problemas monetarios acepta un trabajo aparentemente sencillo: grabar las últimas palabras y consejos de un hombre diagnosticado con una enfermedad terminal a lo largo de un fin de semana. La suma es bastante importante y el panorama es visiblemente tentador. Sin embargo, a medida que pasan las horas, el comportamiento de quien lo contrató se vuelve cada vez más extraño, incómodo y siniestro.
Pocas cosas dan más miedo que sentirte atrapado y Creep logra cumplir con creces este objetivo. Ambientada en un escenario, con dos personajes, esta cinta de terror minimalista logra sostenerse a partir de actuaciones sublimes de Mark Duplass y Patrick Bryce que, además de dar vida al protagonista, dirige la película.
Creep fue elogiada por su capacidad de generar tensión sin recurrir a los clichés típicos del género. Debido a su éxito, se lanzó una secuela en 2017, que continuó desarrollando la atmósfera inquietante y el próximo mes también se estrenará una miniserie antológica bajo el nombre The Creep Tapes.
La bruja (The Witch, 2015) – Dir. Robert Eggers
Ambientada en la Nueva Inglaterra del siglo XVII, La bruja narra la historia de una familia puritana que comienza a desmoronarse después de la misteriosa desaparición de su hijo menor. Esta película, que marca el debut como director de un largometraje de Robert Eggers, se destaca por su atmósfera sombría y su fidelidad histórica, sumergiendo al espectador en un terror lento y psicológico. La bruja no solo es una película escalofriante, sino también una reflexión sobre la religión, el miedo y la locura.
Protagonizada por Anya Taylor-Joy (en su primer papel importante delante cámaras), la película también se destaca por el enfoque de Eggers en la autenticidad histórica, utilizando el dialecto de la época y recreando fielmente la vida de los colonos puritanos. Este nivel de detalle refuerza la inmersión en la historia, convirtiéndola en una propuesta que va más allá del terror convencional.
El apóstol (Apostle, 2018) – Dir. Gareth Evans
Dirigida por Gareth Evans, El apóstol sigue a un hombre que se infiltra en una secta religiosa aislada en una isla para rescatar a su hermana. Esta película es una mezcla única de terror, thriller y horror folclórico, con imágenes perturbadoras y una narrativa intensa. Evans, conocido por su trabajo en la franquicia The Raid, entrega una película visualmente impresionante, con un uso de la tensión y el gore, que va en aumento hasta su perturbador clímax.
El apóstol se destaca por su uso del horror corporal y sus impactantes secuencias de tortura, que lo diferencian de otros thrillers sobrenaturales. Aunque la película no tuvo la atención mediática de otros títulos de Netflix, con los años consiguió un culto de seguidores que aprecian su atmósfera sombría y su narrativa que no teme adentrarse en lo macabro.
Bárbaro (Barbarian, 2022) – Dir. Zach Cregger
Aunque pasó desapercibida para muchos, Bárbaro es otra de las joyas ocultas del terror moderno. La trama sigue a Tess (Georgina Campbell) una mujer que, tras llegar a una casa alquilada, descubre que ya hay alguien parando allí. Keith (Bill Skarsgård), un extraño demasiado carismático y caballeroso, parece haber alquilado el lugar de una manera tan idónea como ella. Sin embargo, está claro que no se siente para nada cómoda ni segura con esa situación. Lo que sigue es un relato inesperado repleto de giros sorprendentes.
Con su primer largometraje, Zach Cregger logra utilizar los elementos más clásicos del género para romperlos y ponerlos patas arriba. Bárbaro tiene suspenso, terror, incluso momentos acertados de humor, pero además una inesperada cuota de crítica social que cuestiona la misoginia y la verdadera naturaleza de los monstruos.
