La decisión anticipada por el presidente Javier Milei de modificar el tipo de cambio y subir los derechos de exportación para los granos, en especialmente en el caso del maíz, movilizó el registro anticipado de ventas del sector exportador. Con una cosecha que podría alcanzar los 56 millones de toneladas en maíz, y la expectativa de lograr exportar unos 39 millones, el sector granario ya anticipó la voluntad de exportar más de 17 millones de toneladas.
En las últimas semanas, el mercado se fue tranquilizando y no se registraron muchas operaciones. Por ello, no se reportaron grandes cambios en el caso del trigo, donde las declaraciones juradas de ventas al exterior (DJVE) no llegan al millón de toneladas, mientras que en el caso del poroto de soja y subproductos, ya se declararon ventas por unos 5,6 millones de toneladas realizadas desde septiembre pasado a la fecha. Estos números se ubican en la misma línea de años anteriores.
La intención de anticipar ventas a una alícuota del 12% para la retención vigente para el maíz, atento al pedido de la Casa Rosada al Congreso de elevar este tributo al 15%, llevó a que, de los 2 millones de toneladas declaradas para exportar a finales de octubre de 2023 se engrosaran en otros 15 millones a fines de diciembre, en línea con las expectativas que mostró el mercado de granos de anticipar negocios en vista de una mayor carga tributaria.
El mercado se fue tranquilizando y no se registraron muchas operaciones. Por ello, no se reportaron grandes cambios en el caso del trigo, donde las declaraciones juradas de ventas al exterior (DJVE) no llegan al millón de toneladas
La movida anticipatoria no solo estuvo movilizada por una eventual suba de retenciones sino también por el ajuste en el tipo de cambio oficial, que pasó de $350 por dólar a $800 y estimuló ventas externas, en especial para el maíz, promovido a instancias de la última edición del programa de Incremento Exportador (con 80% con tipo de cambio oficial y 20% con el dólar financiero).
Esto no sucedió en el caso de la soja (este ciclo sojero apuesta a una cosecha de 50 millones de toneladas), ya que la decisión del gobierno fue dejarla la retención en 33% para el poroto. El escenario tampoco se modifica mucho con el aumento del 31 al 33% para subproductos como harina y aceite de soja. Allí ya se cobraba 2 puntos a la exportación oleaginosa con destino al subsidio de la bolsa de harina de trigo de 25 kilos, con el objetivo de anclar el precio del pan en panaderías.
En el caso del trigo, ya desde la gestión de Sergio Massa como ministro de Economía, se dispuso por falta de granos debido a la sequía que 5,5 millones de toneladas de exportación del cereal abonaran el 12% pero diferida su entrega para el ciclo 2023-24 (una forma de birlarle recursos al siguiente gobierno), esperando mayores existencias tras la superación de la sequía. Por ello, durante el presente año, el fisco sólo deberá percibir nuevos ingresos a cuenta de las declaraciones por casi un millón de toneladas del trigo nuevo cerrado al 18 de enero de 2024.
Evaluación
Javier Preciado Patiño, director de Ría Consultores, explicó a Infobae que desde que asumió Javier Milei “hubo una clara aceleración de la registración de las exportaciones de granos y subproductos. En concreto, al 18 de enero de 2024 se registró entre el 42 y 45% del maíz exportable de la campaña 2023-24. Se espera una buena cosecha de 59 millones de toneladas, y habrá que ver cuánto se puede exportar, quizás entre 38 millones a 40 millones de toneladas, y hoy ya están registrados para vender al exterior unos 17 millones de toneladas”.
Preciado Patiño explicó que entre los factores que convergen en este comportamiento se cuenta que la registración venía demorada a la espera de la definición del escenario político hasta el balotaje del 19 de noviembre, ya que de ese resultado iba a sugerir el tipo de cambio que se iba a establecer. En segundo término, una vez confirmado el triunfo de La Libertad Avanza, y de que se iba a realizar una devaluación significativa, las DJVE se aceleraron para pagar los Derechos de Exportación con el tipo de cambio viejo. Y tercero, cuando el Gobierno anuncia su intención de subirlos se aceleró el registro para frizar la componente impositiva a los ratios actuales”.
“Si prospera el proyecto del Gobierno Nacional en materia de retenciones, el complejo que mejor podría contribuir a la recaudación fiscal es el sojero, ya que sobre una expectativa de exportaciones de poroto de entre 6 y 10 millones de toneladas (en función de los márgenes que deje la molienda), solo se ha registrado un millón de toneladas, mientras que de aceite y harina no se ha registrado más del 15% de lo probablemente exportable en la campaña 2023/24”, expresó el especialista.
También Sebastián Gavaldá, director ejecutivo de Globaltecnos, opinó que “con los cambios propuestos en retenciones, en el caso del trigo el impacto sería cero, ya que en trigo tenemos DJVE que se anotaron en el 2023, unos 5,5 millones de toneladas, propuestas en enero-marzo del año pasado, y que pagaron una retención del 12%, y ahora solo tenemos casi un millón de toneladas declaradas este año. Con ello, tenemos el saldo exportable cubierto. La retención puede elevarse, pero es difícil que se anoten nuevas exportaciones”.
“Con los cambios propuestos por el Gobierno para las retenciones, en el caso del trigo el impacto sería cero” (Sebastián Gavaldá)
“En el caso de la soja, no van a cambiar la alícuota del 33% que rige para la exportación del poroto. Lo que podría cambiar en el caso del aceite y harina de soja, que pasaría del 31 al 33%, no habrá grandes cambios. Estos ingresos se destinaban al Fideicomiso para sostener el precio doméstico de la harina de trigo, y de aumentarse iría a rentas generales”, explicó Gavaldá.
El referente de Globaltecnos aseguró que al evaluar la situación del maíz, sostuvo que “pensando en una exportación de 30 millones de toneladas, hoy ya tenemos declarados 17 millones de toneladas, que ya se pagaron a una retención del 12%. De acá a que salga la ley, creo que un ajuste de las DEX va a tener menos impacto, ya que cada vez se anotan más ventas al 12 por ciento”.
Mercado maicero
Carolina Volonté, economista de la Bolsa de Cereales de Bahía Blanca, aseguró que en la comercialización de maíz 2023-24 “la oferta del grano es mucho mayor que en el ciclo anterior, ya que la oferta rondaría los 56 millones de toneladas, y ya fue comercializada (en el mercado interno) por la industria y principalmente por la exportación de 9,6 millones de toneladas al 10 de enero pasado, cifra que se ubica por encima de la realizada el año pasado a igual fecha, donde se había registrado la venta de 6,9 millones de toneladas. Sin embargo, comparado contra los promedios de los últimos años, el monto es inferior”.
“Un dato a tener en cuenta, además del dato que aportan las declaraciones juradas, es que aún falta ponerle precio al 79% de los 9,6 millones comercializados del ciclo 2023-24, ya que respecto al ciclo 22-23, este porcentaje era del 60%. Y si analizamos las últimas campañas, este porcentaje rondaba el 40%. Por ello, aún falta mucho para ponerle precio a los granos de la presente campaña maicera”, explicó Volonté.
La economista de la Bolsa de Bahía Blanca comentó además que “las declaraciones juradas se ubican en un número de 17 millones de toneladas al 18 de enero. Respecto de igual fecha del año pasado, las DJVE se ubican 7 millones arriba del arranque del 2023. En noviembre y diciembre pasado, dijo Volonté, se hicieron muchas declaraciones de embarque al exterior con la noticia de posibles aumentos en los derechos de exportación (DEX) para anticipar a un aumento en las alícuotas”.