“Cuando le hicieron el test de alcoholemia, superó el límite de la pipeta, que es 3 gramos de alcohol por litro de sangre (gr/l) cuando en provincia rige el Alcohol Cero. Estaba mucho más que borracho”, le advirtió a Infobae uno de los investigadores del crimen de Inocencio Godoy Paniagua, un laburante de 42 años que iba en bicicleta por el barrio de La Lonja, en Pilar, cuando el conductor borracho lo embistió y lo mató.
“Estamos convencidos de que lo arrastró unos 30 metros y, luego, la víctima terminó impactando contra una medianera”, ampliaron los investigadores que trabajan bajo el mando del fiscal Gonzalo Agüero, de la UFI N°4 de Pilar.
Y agregaron: “Luego de atropellar a Godoy Paniagua, el conductor siguió camino, tenía tan poco dominio de su rodado que el coche cayó en un pozo: ahí lo encontraron”.
El siniestro fatal ocurrió este sábado a las 17.30 sobre calle Las Sequoias, a metros del cruce con Carlos Calvo. El detenido fue identificado por las fuentes como Jorge Adalberto Benítez González, de 38 años y que se dedica al rubro de la construcción.
Benítez González manejaba una Volkswagen Suran cuando perdió el dominio del coche y embistió a Godoy Paniagua, que iba en el mismo sentido que su homicida, pero en bicicleta. Inocencio murió en el acto.
Desde el momento del accidente, que fue ventilado por el portal Pilar a Diario, Benítez González duerme en un calabozo acusado de homicidio con dolo eventual. O sea que, para la Justicia, el automovilista “debió haberse representado” que, con semejante nivel de alcohol al volante, podría ocasionarle la muerte a alguien y, pese a ello, siguió manejando y no hizo nada para evitarlo.
El fiscal del caso lo indagó el domingo por la mañana y no escuchó una palabra del imputado de nacionalidad paraguaya que tiene un defensor particular. Luego, Agüero lo citó este lunes: Benítez González volvió a elegir el silencio.
En el lugar del siniestro vial hay un domo, pero no funciona, aclararon las fuentes del caso. Y dijeron que el fiscal pidió un examen de sangre para checar el nivel de alcohol que tenía el conductor detenido y corroborar lo que dio la pipeta.
”Ese mismo sábado, mucho más tarde, se le hizo otra vez el test de alcoholemia y tenía 1,95 gramos de alcohol por litro de sangre, eso quiere decir que tenía mucho más que 3 gr/l no bien fue el accidente, más del límite de la pipeta”, se sorprendieron los investigadores.
Libre y condenado
El 9 de mayo de 2021, Joaquín Duhalde Bisi (22), manejaba el Audi de su papá mientras estaba borracho y chocó a gran velocidad contra con una columna en el Camino de los Remeros. La Justicia este lunes convalidó el juicio abreviado y fue condenado a 4 años de prisión por las muertes de sus amigos Franco Rossi y Joaquín Alimonda, quienes fallecieron en el acto en el accidente.
Tras el accidente, el resultado de la alcoholemia que registró Duhalde Bisi fue de 1,39 gramos por litro de sangre, casi el triple de lo permitido (era de 0,5 gr/l) por ese entonces sin Ley de Alcohol Cero. Por lo que quedó detenido hasta que logró el beneficio de la domiciliaria en julio de 2021, cuando el juez de garantías Daniel Martínez avaló los certificados médicos que indicaban que el sospechoso padece asma y es celiaco y que fueron presentados por los abogados del imputado.
La condena homologada este lunes incluye además 8 años de inhabilitación especial para manejar, abstenerse del consumo de estupefacientes y de abusar de bebidas alcohólicas; mantener sus estudios o procurarse un oficio, industria, arte o profesión; no cometer nuevos delitos; y efectuar un curso de reeducación del uso de la vía pública desarrollado por la Comisión Nacional de Tránsito y Seguridad Vial
El Tribunal Oral en lo Criminal N°7 de San Isidro a, su vez, le dio la libertad condicional. Ya tenía domiciliaria.