A pesar de las diferencias ideológicas, el Gobierno retomó recientemente las relaciones con China y avanzó con acercamientos para acordar con el régimen la continuidad de los vínculos comerciales entre ambos países, de la mano principalmente de la canciller Diana Mondino.
Luego de la última Asamblea General de la ONU, que se realizó en la sede central del organismo, en Nueva York, la ministra de Relaciones Exteriores de la Argentina mantuvo una sorpresiva reunión bilateral con su par chino, Wang Yi, acompañada por la secretaria general de la Presidencia, Karina Milei, y el ministro de Economía, Luis “Toto” Caputo.
De acuerdo con lo que precisaron fuentes diplomáticas del régimen asiático luego del encuentro, el canciller “manifestó la disposición china de seguir trabajando con Argentina como buen amigo y socio en pos de desarrollo, expandiendo la cooperación en las diversas áreas, y compartiendo oportunidades de desarrollo”.
“Y la ministra Mondino destacó a su vez el objetivo común de ambos países de impulsar las relaciones bilaterales y las cooperaciones económicas y comerciales, manifestando la buena voluntad de participar de la cooperación China-América Latina y el Caribe”, expresaron a través de un mensaje que publicaron en la cuenta de X de la Embajada de China en Argentina.
De acuerdo con lo que trascendió luego de la reunión, Mondino destacó la importancia del mercado chino y la disposición del país sudamericano para recibir inversiones en sectores estratégicos. Este mensaje ocurre en un contexto de acercamiento a pesar de las declaraciones del presidente Javier Milei, quien había manifestado intenciones de revisar las relaciones internacionales con China.
De hecho, tal como había anticipado Infobae, en su duro discurso ante la ONU el Jefe de Estado tenía previsto también cuestionar al organismo multilateral por no rechazar enfáticamente la ofensiva de la nación comunista sobre Occidente, aunque finalmente no hizo mención de este asunto.
El vínculo entre ambas naciones ha sido clave en el desarrollo de proyectos conjuntos, especialmente en infraestructura y energía, áreas en las que Argentina ha buscado intensificar la cooperación. Durante su reunión diplomática, de hecho, la canciller hizo hincapié en que China es un socio estratégico para el crecimiento económico argentino, subrayando la necesidad de incrementar las exportaciones argentinas hacia el gigante asiático, uno de los mayores mercados del mundo.
Mondino también expresó que el Gobierno está dispuesto a continuar ampliando estos lazos comerciales a pesar de las diferencias ideológicas y geopolíticas entre los dos países. El mensaje fue bien recibido por la delegación china, que ratificó su interés en seguir cooperando en temas económicos con Argentina.
“Nosotros no hacemos pacto con comunistas. Yo no promovería la relación con comunistas. Ni con Cuba, ni con Venezuela, ni con Corea del Norte, ni con Nicaragua, ni con China”, dijo Milei el 16 de octubre de 2023, en plena campaña electoral, cuando le preguntaron su opinión sobre el régimen comunista que encabeza Xi Jinping.
En mayo y junio últimos, la Argentina logró el casi inédito récord de acumular dos meses seguidos de superávit en el comercio bilateral con China, aunque todavía no pudo revertir -aunque sí achicar fuertemente- algo que se volvió una constante desde 2008: un consistente y elevado déficit en el intercambio con el gigante asiático.
En el primer semestre de este año el rojo para la Argentina fue de USD 1.029 millones, cifra mínima comparada con los déficits bilaterales de 2022 y 2023: en ambos años, durante el gobierno de Alberto Fernández y Cristina Fernández de Kirchner (CFK), los saldos negativos superaron claramente los USD 9.000 millones.
Mientras tanto, si bien la mayor parte de la comitiva argentina que viajó a los Estados Unidos para la Asamblea con la ONU regresó ya a Buenos Aires, Mondino continúa con su agenda en Nueva York y, tras un encuentro con su par del Reino Unido, anunció un acuerdo para que familiares de los caídos en la Guerra de Malvinas puedan visitar las tumbas de sus seres queridos.
También hubo un arreglo para la tercera fase del Plan Proyecto Humanitario conjuntamente con la Cruz Roja Internacional para el reconocimiento de los cuerpos de los soldados enterrados sin identificación y un vuelo entre las islas y el territorio continental argentino de forma mensual.