Un adolescente de 17 años fue detenido en La Plata luego de haber sido señalado por el autor de los disparos al aire que realizó en un ritual tumbero durante el velatorio de Elías Andrade, el joven de 23 años que murió de un tiro en la espalda cuando escapaba de la Policía.
Luego de que se viralizara un video, en el que uno de los allegados de Andrade sacó un arma y efectuó varios balazos hacia el cielo a modo de “último adiós”, las autoridades lo identificaron como un menor de edad que contaba con antecedentes penales por robo y hurto de una moto.
A raíz de esto, la Justicia ordenó su inmediata detención y la realización de dos allanamientos en dos viviendas. La primera estaba ubicada en calle 62, entre 161 y 162, mientras que el segundo domicilio estaba situado en 148, entre 50 y 52.
De acuerdo con la información publicada por el medio local 0221, se abrió una causa caratulada como “abuso de armas” en contra del menor de edad. No obstante, los agentes continuarán con las tareas investigativas necesarias para dar con el paradero del resto de los participantes.
El hecho ocurrió el lunes pasado, cuando los familiares, amigos y conocidos de Andrade se reunieron en una casa velatoria de calle 66 y 132 en la localidad de Los Hornos para despedir sus restos. Entre los participantes se encontraba un grupo de motochorros que no solo realizaron el tradicional ritual tumbero, sino que aprovecharon la ocasión para robar una moto que estaba estacionada en 131 y 67.
Según las imágenes que captaron las cámaras de seguridad de la zona, dos delincuentes que se encontraban entre el tumulto de gente destrabaron el manubrio de una moto KTM Duke y, en cuestión de segundos, huyeron con ella. Por el momento, ninguno de los dos habría sido identificado por los investigadores.
Investigarán si la muerte de Elías Andrade se trató de un caso de gatillo fácil
El hecho ocurrió en la madrugada del jueves 29 de agosto, cuando Elías Andrade se escapaba de las autoridades luego de haber robado una moto KTM Duke 250 en la intersección de 12 y 518. En medio de la persecución policial, el fugitivo chocó al perder el control cuando intentaba pasar por encima de una rambla.
Apenas cayó, su cabeza se golpeó contra el asfalto. Por este motivo, tuvo que ser trasladado hacia el Hospital San Roque de Gonnet, en donde el personal médico confirmó su muerte. Sin embargo, esta no fue provocada por la caída, sino que había recibido un disparo en la espalda.
Luego de que el cadáver fuera sometido a una autopsia, los forenses constataron la presencia de una herida de bala y señalaron que el impacto del proyectil habría sido clave en su muerte. Como consecuencia de esto, la Justicia tiene bajo la mira a los ocho policías que participaron de la persecución.
La causa fue asignada al fiscal de la Unidad Funcional de Instrucción N°6 de La Plata, Juan Menucci, quien ordenó que las armas reglamentarias y los celulares de los sospechosos fueran secuestrados y analizados, con el fin de descubrir quién habría sido el autor del disparo. Asimismo, los dos patrulleros que se utilizaron esa madrugada fueron incautados al igual que se solicitó el recorrido registrado por el GPS.
Hasta el momento, la carátula del caso fue definida como “robo calificado en poblado y en banda”, pero existiría la posibilidad de que ésta fuera modificada. En este sentido, también se baraja la posibilidad de que los oficiales pudieran enfrentar cargos por su accionar, debido a que no se comprobó que Andrade estuviera armado o que hubiera representado una amenaza para que se abriera fuego en su contra.