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Después del caos en la previa del partido con serios incidentes en los accesos al estadio que demoraron el comienzo de la final entre Argentina y Colombia, finalmente se puso en marcha el duelo decisivo de la Copa América 2024. Y en la antesala, se produjeron varios momentos especiales para los fanáticos de la Albiceleste.
Antes del ingreso de ambos seleccionados, varias estrellas del fútbol sudamericano fueron elegidos para ingresar el trofeo al campo de juego. Por el lado del equipo cafetero, los que acompañaron la copa fueron Mario Yepes e Iván Córdoba, dos ex defensores del conjunto que se consagró campeón de la Copa América 2001. Por el lado de Argentina, los que se sumaron fueron dos viejas glorias del combinado nacional como Claudio Caniggia y Oscar Ruggeri.
El histórico marcador central, que fue campeón del mundo en México 1986 con el recordado seleccionado que lideró Diego Maradona, y que ganó el título de América como capitán en dos ocasiones (1991 y 1993) estuvo acompañado por el rubio delantero, que se transformó en un ícono durante la década del 90, sobre todo tras su actuación en el Mundial de Italia -aquel recordado gol a Brasil- y en la Copa del Mundo de Estados Unidos 1994, en la que se destacó con un doblete frente a Nigeria, en el duelo por la fase de grupos.
Por otra parte, otro de los momentos más esperados fue cuando se entonaron los himnos de ambos finalistas. Para Colombia, la elegida fue Karol G, mientras que Abol Pintos se encargó de interpretar la versión recortada de la canción patria. Durante su entonación, se pudo ver la emoción de los futbolistas de Argentina, entre ellos la de Ángel Di María, quien se despedirá de la Selección.
Es más, cuando la cámara de la transmisión oficial mostró a Dibu Martínez y el propio Lionel Messi, se los pudo ver a ambos muy concentrados cantando el himno argentino. Lo mismo que Scaloni y el resto del cuerpo técnico argentino.
Hay que recordar que el ganador de la final levantará el trofeo original de la Copa América, confeccionado en 1917. Este emblemático trofeo fue diseñado por la Casa Escasany a un costo de 3,000 francos suizos de la época, siendo un regalo del Ministerio de Relaciones Exteriores de Argentina. A lo largo del tiempo, sufrió varias restauraciones y el retorno de esta copa original marca un momento histórico en el torneo de selecciones más antiguo del mundo.
Daniel Escasany, descendiente de los fundadores de la Casa Escasany, estuvo a cargo de la última restauración de la copa. “Para mí esto es ponerle un moño a mi profesión. Me rompí el alma durante 45 años y de repente vienen y me ofrecen restaurar un premio que se compró en la casa de mi familia que es famosa a nivel mundial”, expresó Escasany.
En el Departamento Navarro, provincia de Buenos Aires, se restauró la base de madera original del trofeo, agregando chapas con los nombres de los campeones perdidas, como la de Brasil en 1989.
Durante su centenaria historia, este trofeo ha sido levantado por leyendas del fútbol como Pelé y Zico, ha sido testigo de momentos memorables en el fútbol continental, como el que sucedió hace tres años en el mítico estadio Maracaná cuando Lionel Messi levantó la copa tras el triunfo de Argentina ante Brasil con el recordado gol de Ángel Di María.
