(Desde Montevideo, Uruguay) – La incertidumbre de los exportadores uruguayos que venden a Argentina, que no saben si podrán cobrar las deudas que tienen, fue uno de los temas que trataron la canciller Diana Mondino y su par uruguayo, Omar Paganini, en un encuentro que mantuvieron este miércoles. Fue una reunión bilateral previo a la que tendrían los cancilleres del Mercosur en Paraguay.
Paganini expresó a Mondino su “preocupación” por estas deudas, según informó El País este jueves. La ministra del gobierno de Javier Milei se comprometió a hacer un “seguimiento de la situación”.
Los empresarios uruguayos rechazan cobrar las deudas a través de los Bonos para la Reconstrucción de una Argentina Libre (Bopreal), el instrumento diseñado por el gobierno argentino para absorber pesos del sistema financiero y darle una salida a los pasivos.
El presidente de la Unión de Exportadores de Uruguay, Facundo Márquez, declaró al medio uruguayo que en la gremial empresarial están haciendo un relevamiento entre los socios para llegar a una cifra actualizada de la deuda comercial que los importadores argentinos mantienen con los proveedores uruguayos. Ese valor, actualizó Márquez, superará los USD 80 millones.
Las exportaciones de Uruguay hacia Argentina anualmente representan entre USD 630 millones y USD 700 millones. Si bien no tienen la misma relevancia para Uruguay que en el pasado, muchas empresas dependen casi en un 95% del mercado argentino. Los exportadores con créditos pendientes a pagar pertenecen a diversos rubros: plásticos, lácteos, medicamentos, productos veterinarios, pinturas, cueros, grasas y aceites, autopartes, productos químicos, materiales e instrumentos médicos y maquinaria industrial.
Las estimaciones iniciales de los exportadores indicaban que la deuda ascendía a USD 20 millones, pero Márquez aclaró que esa cifra se trataba de una “lista previa” que aún está en construcción.
La diferencia entre la primera y la segunda estimación se da porque no todos los exportadores quieren decir cuánto se les debe, por lo que no se trata de una cifra ni oficial ni exacta. Las empresas, sin embargo, esta semana mostraron un cambio en su disposición y comenzaron a reportar cuánto es la deuda.
Márquez explicó que el gobierno necesita saber a cuánto asciende la suma para presentar la información en las “conversaciones que se están llevando adelante”. Los exportadores confían en que el tema formará parte “central” de la agenda en la primera reunión que mantenga Milei con el presidente uruguayo Luis Lacalle Pou.
“Esto se debe ir evaluando casi a diario. La idea es ir encontrando nuevas noticias todos los días, ver qué se está resolviendo. Generalmente, la mayor parte de la información la tenemos de los propios exportadores, que son los que están en el día a día (en contacto con los clientes argentinos)”, dijo el presidente de la gremial de exportadores.
En la Cámara de Industrias, en tanto, hay algunos matices respecto al rol que debe mantener el gobierno ante las autoridades argentinas. El presidente de la comisión de Comercio Exterior de esa gremial, Washington Durán, declaró a El País que la deuda fue generada por negocios “entre privados” que no estuvieron influidos por las autoridades nacionales.
Según este ejecutivo, el gobierno podrá ayudar “políticamente” a plantear este asunto ante sus pares de Argentina, pero se trata “estrictamente de un tema entre privados”.
En el encuentro de este martes, Mondino y Paganini acordaron avanzar “a la brevedad posible” en el dragado a 14 metros del canal de acceso a Montevideo, según el comunicado de la Cancillería uruguaya.
Los ministros también reafirmaron la “voluntad permanente de avanzar en la dinamización del Mercosur”. “La profundización de la integración es una herramienta necesaria para alcanzar mayores niveles de desarrollo, sobre todo cuando sirve de plataforma para mejorar la competitividad y la inserción nacional de nuestros países”, dice el comunicado.